Los poppers son un producto muy antiguo y poco conocido por el público en general. A menudo, se asocian con la comunidad gay, pero hay que saber que no solo los homosexuales lo consumen. Los poppers son un afrodisíaco que todo el mundo puede disfrutar.

Los poppers nacieron a mitad del siglo XIX, en el año 1844. Su antigüedad puede ser una de las razones por las cuales pocas personas los conocen, dejando en el imaginario colectivo la idea de que los poppers solo se utilizan para satisfacer los deseos carnales de la comunidad gay. Afortunadamente, esto no es así, pues los poppers influyen en una gran parte de la población.

Antiguamente vendidos como medicamentos, estos productos son conocidos como nitritos en el mundo científico. Perteneciente a la familia de los nitritos de alquilo, los primeros poppers se fabricaban a base de nitrito de amilo. Este nitrito sigue siendo hoy en día el nitrito más potente del mundo. Más tarde, sería sustituido por otros fármacos.

Como ya no se utiliza con fines médicos, ahora se clasifica como un producto para la recreación. Los poppers se utilizan tanto para fiestas como para uso íntimo. Tras su inhalación, estos producen una explosión de sensaciones estimulantes. Puede mejorar el rendimiento sexual o, en el caso del uso en fiestas, ponernos en un estado de euforia. Los efectos de este estimulante son efímeros.

El popper es un líquido mágico que atrae a diferentes tipos de personas de la población: mujeres, comunidad gay, heterosexuales, jóvenes, personas de 40 años e incluso personas de 60 años. Para entender que los poppers no son una cuestión de color o de relaciones sexuales, te invitamos a pasar por la etapa de “experimentación”, si es que no lo has hecho ya.

La comunidad gay

El popper fue descubierto en 1844 por un químico francés. Entonces se utilizaba como medicamento para tratar diversas enfermedades, como la angina de pecho. Sustituido en el siglo XX por la trinitrina (medicamento usado para tratar los dolores de pecho), el popper fue adoptado por la mafia americana.

En el momento en el que la legislación estadounidense prohibía los poppers en Estados Unidos, la mafia decidió enfocarse en los homosexuales a través de los sex-shops clandestinos y las revistas LGBTQ. Así, se vendían clandestinamente a pesar de la prohibición impuesta por la legislación estadounidense. Los mafiosos creyeron, correctamente, que la comunidad gay sería muy receptiva a estos anuncios de popper.

Por supuesto, las personas LGBTQ+ ya tenían esta forma avanzada de condimentar sus relaciones sexuales, así que pedían sus poppers por teléfono en el mercado negro. Desde entonces, los poppers han sido relacionados con los gays y los narcóticos, porque se vendían bajo cuerda.

Entonces, hay que decirlo, la población gay se apoderó de este producto afrodisíaco, ideal para estimular el deseo, el placer y las relaciones sexuales. Hoy en día, la comunidad gay asume su amor por los poppers.

Asimismo, en los años 70, artistas de todo tipo -pintores, músicos, escultores, bailarines- también acudían a los poppers. Luego se desarrollaría la venta de poppers en clubes y otros locales nocturnos.

Por consiguiente, decir que los poppers son sólo para los gays es “cliché”. Hoy podemos decir que es un estereotipo basado en una moda antigua, bastante obsoleta.

Las mujeres

Desde la mayoría de edad hasta más de 60 años, las mujeres son, después de los homosexuales, las que más consumen poppers.

Los efectos de los poppers no difieren mucho de un hombre a una mujer. Al igual que los hombres, las mujeres sienten euforia después de usar poppers, sus músculos se dilatan y se relajan. Por último, según algunos testimonios en línea, el efecto de desinhibición estimula su imaginación y creatividad en la cama. Sin embargo, hay algunos matices. Su orgasmo es más potente, más fuerte, ya sea un orgasmo vaginal o anal.

Algunos fabricantes han diseñado poppers especialmente para las mujeres. Estos poppers se venden en un envase más glamuroso, con colores brillantes. La fórmula de los poppers está aromatizada para dar un olor más suave y dulce. Las mujeres prefieren oler un aroma más dulce al inhalar mientras disfrutan del poder del nitrito. Porque a pesar del aroma más dulce, los efectos siguen siendo muy parecidos a los de un popper tradicional. Lo importante en la fórmula de los poppers es el nitrito y el porcentaje de este nitrito en ella.

Los poppers son muy populares entre las mujeres, incluso las heterosexuales. En efecto, el popper relaja los músculos blandos y facilita así la penetración vaginal. Puede aumentar la lubricación de la vagina. Ten en cuenta que muchos más heterosexuales practican la sodomía. Las mentes se abren y los orificios también. Los poppers son, por tanto, el producto perfecto para una primera experiencia anal, tanto para hombres como para mujeres. ¡El punto P se está convirtiendo en un interés para todos!

Los poppers, al igual que el alcohol, están estrictamente prohibidos para ser consumidos por las mujeres embarazadas. Los poppers atraviesan la placenta y pueden perjudicar el desarrollo del bebé, generando lo que se conoce como “síndrome del bebé azul“. En efecto, los poppers impiden la buena circulación del oxígeno, por lo que algunas partes del cuerpo del bebé pueden ponerse azules.

Los jóvenes

Mucha gente habla de los poppers como una de las “drogas” favoritas de los jóvenes. Pero esto sigue siendo debido a la falta de conocimiento del producto. ¡El popper no es una droga!

Las fiestas y los festivales están llenos de poppers y de su aroma desde los años 80. Hoy en día, es un producto imprescindible, e incluso puedes encontrar puestos de poppers en algunos festivales.

Los jóvenes aprecian los poppers por su uso sexual, pero también y sobre todo por los efectos de euforia que proporcionan. Es un excelente estimulante para pasar dos minutos de risas con los amigos, o incluso cinco minutos si la risa es contagiosa.

Cuadragenarios

Tenían 20 años en la década de 1990. En tu opinión, ¿saben lo que es el popper? Oh sí, lo saben muy bien. Cuando eran jóvenes, solían dar pequeñas caladas de poppers para darse un pequeño empujón en los bailes. Hoy en día, siguen riendo y disfrutando de sus efectos.

En resumen

Con los poppers no hay discriminación. Jóvenes, viejos, mujeres, hombres, homosexuales, heterosexuales, negros, blancos, rojos, todos tenemos derecho a nuestra parte de placer. ¡El popper es un producto de placer para todos!